Viaje por el Adriatico 24/07/2019
Dia 13 24: Vlore (Albania) - Meteora (Grecia) 356 kms
Nos levantamos y continuamos hacia el Este, hicimos bien en parar en cuanto salimos de Vlore porque en cuanto empezamos el dia nos toca subir un puertaco impresionandte en el Parque Nacional de llogara, la furgoneta sudó lo suyo para poder subir, los paisajes valian la pena el esfuerzo. Ya arriba desayunamos en el bar restaurant dervishalliu, impresionantes las vistas desde alli. Ya no nos planteamos el pasar a Girokastra, la muralla que tenemos a nuestra izquierda es enorme, de hecho vemos mutitud de 4x4 en la carretera por lo que suponemos que hay varias rutas por la zona, desde luego van bien armados.
Bajada trepidante de nuevo hasta la costa y la altura de himare nos paramos para darnos un baño en la playa, la arena vuelven a ser cantos rodados, cuando nos metemos en el coche nos cocemos, decidimos continuar. La costa es muy chula pero muy lenta, vamos a 60 por hora todo curvas y sube baja pero una preciosidad.
Pasamos por Puerto Palermo y hay bastante gente, autocaravanas ... el sitio esta muy chulo pero es muy pequeño, decidimos continuar.
El viaje se hace bastante tedioso por la lentitud con la que nos movemos, llegamos a Sarande otro puerto del pais, el segundo despues de Durres, ningun atractivo en particular, mas que nada por continuar por la costa y adentrarnos en el parque natural de Kombetar y Butrinto, precioso.
Al final del parque estan las ruinas romanas de butrinto, pero no las visitamos. Cruzamos el entrante de mar en una barcaza que es la unica opcion que tenemos sin dar la vuelta.
Continuamos por unas carreteras inospitas, dejadas de la mano de Dios, no parece que haya mucha gente que coja la barcaza porque no vemos nada que nos indique como salir de alli, buscamos la ultima gasolinera para gastar los lekhes que nos quedan y nos dirigimos a la frontera con Grecia.
En la frontera tardamos poco en pasar, sin contratiempos. Lo primero que hacemos al llegar a grecia, como no, es irnos a la playa a comer. Buscamos la "deep sea beach parki", donde las tumbonas valen la consumicion y ademas tienes wifi ducha,s baños, estaba perfecto, nos quedamos ahi hasta las 17 horas.
Toca arrancar a Igoumenitsa a comprar el billete de barco que nos llevara a Brindisi. El pueblo es pequeño y se llega rapido al puerto.
Los griegos son brutos como arados y parece cabreados en todo lo que te dicen... es igual hay que poner buena cara. Al final compramos el billete para el dia siguiente pero hay que hacer el checkin antes de subirse al barco a las 23:59.
Desde aqui arrancamos hacia Meteora ya de tarde, pensabamos ir por carretera porque no tenemos prisa, seguimos las instrucciones del google maps, salimos de la autopista de en un tramo gratuito y nos metemos en la boca del lobo. Carretera de montaña que cambia entre asfalto y tierra, no hay ningun pueblo ni nada que se le aproxime, nadie a quien preguntar. Pasamos una curva y vemos a wally, intentamos explicarle para echar gasolina en la furgoneta y parece de otro planeta, se quedo pensando 20 secs antes de contestar, nosotros flipando, daba igual lo que nos dijera a semejante especimen no se le puede hacer mucho caso, nos podria llevar a raticulin...
Seguimos sin mucho rumbo esperando ir a dar a una carretera mas general y asi es, al cabo de 10 min desenbocamos en una carretera pintada que ya es todo un logro, desde aqui bajamos hasta un pueblo en el que volvemos a ver la entrada de la autopista, no lo pensamos dos veces, volvemos a la autopista... que ademas no es muy cara igual 5 eur en total. La autopista es un continuo de tuneles, no me quiero imaginar ir por carretera por este terreno. Paramos a echar gasoil y continuamos a Meteora. Desde la salida de la autopista quedan unos 30 kms hasta Meteora, los camiones invaden la carretera y es un suplicio pasarlos, llaman la atencion las casitas que hay en cada curva, no se cual es su significado.
Ya atardeciendo llegamos a Meteora. No tiene otra palabra mas que espectacular, Begoña y la niña se quieren quedar esperando abajo en el restaturante porque están cansadas pero Lucas y yo no queremos perdernos el atardecer. Una maravilla, nos da para darle una vuelta a todos los monasterios incluidos los miradores, increible obra de ingenieria, solo quedan 5 en pie pero dicen que hubo mas de 30 en su momento, eso debio ser alucinante.
Bajamos y cenamos donde estaban Bego y Aitana, yo pruebo una mousakka y cerveza griega mythos y los niños y bego se van a platos mas normales spaguettis y pollo. Para dormir nos vamos a una zona tranquila y de sombra a las afueras del camping. Cansados como estabamos no discutimos mucho donde dormir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario