Luna de Miel por Cuba en bicicleta 30/05/2005

Nos levantamos muy temprano a las 7:30 h bajamos rapido a desayunar: zumo de naranja, huevo frito, mermelada y café con leche; después de eso nos fuimos a visitar el patio del Convento donde estabamos que era como un jardin Botánico. De ahí al banco con muchos niños practicando gimnasia en la plaza vieja y el primer contacto real en la Habana. Cambiamos 1000$ a peso convertible, volvimos al Convento y ahí montamos todo, reservamos la vuelta para el dia 25 de Junio y nos fuimos rapido a la estacion de tren, primero a la de Coubre y después a la Central que era de donde salia nuestro tren, de la Central a la Lateral a comprar el billete y después al otro lateral a dejar la bici ya con la compañía de un chaval cubano muy majo se llamaba Pedro, fueron 30 pesos/uno; Bego, yo y la bici 47 pesos pudimos regatear pero aun no sabiamos, empezamos a entender la realidad cubana de las dos monedas. Eran mas o menos las 11 h de la mañana cuando lo teniamos todo listo, el tren salia a las 14:15 h, el regular, que era el que nos dejaba llevar la bici. Cambiamos 50$ a peso cubano, no del convertible, que nos valdria de bastante para comprar bocadillos, agua, refrescos… saque algunas fotos y dimos unos paseos por los aledaños. Al final el tren salio sobre las 16:30 h tuvimos que enseñar el billete tres veces pero ese es el estilo cubano, desde las 13 h el tren se lo paso en el taller con la mayor naturalidadbera algo comprendido por todos pero a nadie le preocupaba, hoy saldriamos.



Ahora mismo estamos en el tren ya se averio una vez, tiempo que provechamos para coger mangos, no hay prisa, es la filosofia cubana. Begoña parece que se tranquilizo un poco porque lo veia todo como un drama y ahora parece que se empieza a adaptar.
Son las 19:15 h de la tarde y estamos en Matanzas aun. Encontramos dos chavales en el tren que son de Pamplona y van a hacer lo mismo que nosotros. El tren regular bien sin aire acondicionado pero precioso. El olor canta un poco pero es lo que hay.